lunes, 30 de agosto de 2010
Marx, Cristo y Satán unidos en la lucha. (Alianza Neoista)
PREFACIO: Neoist Alliance es una Organización surgida en 1993 en Londres, creada por Stewart Home y otros aliados. Influenciados por distintas tradiciones Ocultistas, así como también por Karl Marx, el Situacionismo y Guy Debord; sus fines eran la acción política revolucionaria, y para estos fines el así llamado “ocultismo” tenía dentro de sus esquemas un rol fundamental. Sus ideas básicas consisten en que las indeseables condiciones Capitalistas de existencia se derivan de la conjunción de dos fenómenos opuestos y complementarios : el Ocultismo “clásico” (John Dee, Eliphas Levi, Aleister Crowley) y el Avant-Garde Artístico (Romanticismo, Futurismo, Dada, Surrealismo), su estrategia es realizar en su máximo grado a ambas corrientes para su superación dialéctica y provocar así el fin del Capitalismo y el Eón Burgués. Resulta innegable que a la N.A. y a Stewart Home debemos uno de los discursos contraculturales más originales que se han oído.
MARX, CRISTO Y SATÁN UNIDOS EN LA LUCHA
El Bolchevismo y el Nacional-Socialismo fueron las corrientes gemelas que marcaron la bifurcación final entre ciencia y religión. Fueron contemporáneos, aunque no en una forma totalmente consciente, de la última defensa de una visión del mundo Newtoniana y del fracaso final de esta visión, que los hizo prisioneros del mismo campo “intelectual”, cuya degradación ellos mismos anunciaron. Es actualmente un cliché, tanto en los círculos liberales como en los libertarios afirmar que el Bolchevismo y el Nacional-Socialismo eran simultáneamente relacionados y opuestos dentro de la historia. Esta oposición, que cada parte considera como su aspecto más crucial y su “contribución” más radical, revela lo inadecuado de su crítica en su aspecto más interno, su desarrollo unilateral. El Nacional-Socialismo deseaba suprimir la Masonería sin realizarla. El Bolchevismo deseaba realizar la Masonería sin suprimirla. La posición crítica que realiza ahora la Alianza Neoista demuestra que la supresión y la realización de la Masonería son aspectos inseparables de una sola superación de las Tradiciones Sufíes en su forma Templaria.
Cualquier persona que permite a sus ojos ver podrá observar que los Ocultistas más importantes se encuentran en la clase dominante, mientras que aquellos grupos New Age que atraen adeptos ofreciendo entrenamiento en la “Magia del Caos”, “Visualización Creativa” o “Frotación del Buda para obtener dinero” son peores que mediocres amateurs, charlatanes sin vergüenza. Incluso, muchos de ellos trabajan conscientemente para prevenir que evolucione un sistema de manipulación simbólica completamente autónomo del estado. Actualmente, la Masonería es una institución que actúa en defensa del Status Quo, pero como los Bavarian Illuminati demostraron en el decimoctavo siglo, el poder siempre corre en dos direcciones, y rara vez emana desde lo que generalmente en mal percibido como el “centro”. La forma celular de las Sociedades Secretas, diseñada por sus fundadores para la seguridad del movimiento puede igualmente ser usada para eclipsar a los líderes internos, que se transforman así en involuntarias cabezas visibles de actividades que ellos jamás permitirían. Al infiltrarse en las Logias Masónicas es posible hacer circular por todo el mundo un mensaje herético de libertad.
Sin embargo, existe un movimiento dual en todas nuestras actividades, y el ritual matutino realizado en el exterior de la Gran Logia (de Londres) sirvió para reducir el poder de los elementos conservadores dentro del Rito al aplicar las energías acumuladas alrededor de sus cuarteles para fines progresistas. El edificio en sí mismo, ubicado sobre la calle Great Queen, entre las estaciones de subte de Holborn y Covent Garden, es imponente y sin embargo simplón. Desde la distancia, con su torre de 200 pies de altura, resulta impresionante. Pero al acercarse, revela ser bastante común, consiste simplemente en un trabajo poco refinado sobre piedra, con muy pocos motivos decorativos. El flanco ubicado al Este de la Gran Logia incorpora un Banco y varios negocios, mientras que el lado Norte, en gran parte, está ocupado por los cuartos de dormir y un restaurant y una taberna masónica. Así, el observador casual se lleva la impresión de que la Gran Logia no es un gran edificio unitario, sino que forma parte de un complejo de distintas viviendas y negocios. Como cualquier ladronzuelo de la ciudad sabe, es posible para los “masones regulares” entrar al edificio desde los cuartos de dormir, y así evitar la vergüenza de ser visto “en la cuadra” por los “mundanos”. Como corresponde a una Sociedad Secreta, el aislamiento de la masonería con respecto al resto del mundo no es visible desde afuera. Un hoyo separa todo, menos la entrada al Gran Templo, del resto del edificio, que lo rodea. Más allá de esto, la Gran Logia contiene oficinas, cuartos de encuentro, pequeños templos, cuartos de recepción, una biblioteca y un museo. A partir de una agenda bimestral, varias de estas cámaras con alquiladas a las innumerables Logias “regulares” londinenses.
Yendo ya hacía asuntos más inmediatamente visibles, a pesar de que nuestra tecnología ocultista no es ajena al sincretismo de símbolos que puede ser encontrado en el Rito Masón del Arco Real, tiene claramente una importancia mayor que la de un sistema de creencias construido sobre nostalgias del Paganismo. De igual manera que la Revolución Francesa fue efectuada con el disfraz de la antigua Roma, sus patrones Franc-Masónicos abandonaron a Cristo en su retorno a Jehová, Lucifer y Osiris -esta elección de ídolos refleja el excesivo amor por el mundo clásico y pre-clásico que prevalecía en las mentes educadas de ese período de la historia europea. Obviamente, las innovaciones teológicas efectuadas por la Process Church of the Final Judgement, que desvió el pensamiento de los pensadores post-masónicos hacia Jehová, Lucifer y Cristo, constituyó un gran avance por sobre las enseñanzas del Arco Real Masónico. Sin embargo, sólo la Trinidad de Marx, Cristo y Satán unidos en la lucha, creada por la Alianza Neoista, puede abarcar con precisión la visión religiosa del mundo que prevalecerá en los próximos siglos.
Ya que el avant-garde del Siglo XX fue una muy avanzada derivación de la cultura post-masónica, nunca ha gozado del reconocimiento por parte de la muy conservadora Gran Logia Unida. Sin embargo, las conexiones entre el así llamado “anti-arte” y la “Hermandad” son relativamente obvias para cualquiera que posea la habilidad para leer los signos más relevantes. El Dadaísmo apareció por primera vez en un Club de Zurich llamado Cabaret Voltaire. Por haber sido un Masón y por haber sido uno de los arquitectos que diseño la Revolución Francesa, el nombre de Voltaire ha sido frecuentemente utilizado en los títulos de las Logias afiliadas a la Masonería Oriental del continente europeo. De forma similar, el hecho de que dos de los principales jerarcas del Movimiento Letrista, Isidore Isou y Maurice Lemaitre, fueron presentado el uno al otro por Louis Pauwels (co-autor de la notoria “La Mañana de los Magos”) es algo públicamente sabido. De igual manera, el nombre que adoptó Isidore Isou puede ser leído etimológicamente como “Jesús Jesús”, mientras que el Letrismo no fue otra cosa que una forma avanzada de Qabalah, cuyo propósito real está escondido para el mundano bajo el disfraz de “movimiento artístico”.
Una de las estrellas del temprano Letrismo, Ivan Chtcheglov, escribió el documento que sería fundador de otra Organización Masónica: la Situacionista Internacional. “Fórmula para un Nuevo Urbanismo” es un texto que de forma encubierta utiliza una lenguaje Masónico tanto en su título como en sus contenidos, así, Chtcheglov creó los fundamentos para el uso esotérico, por parte de los Situacionistas, de la imaginería arquitectónica y geográfica. Su texto comienza observando que “ya no existe más un Templo del Sol”. Los Letristas, y luego los Situacionistas, estaban profundamente disgustados por el hecho de que en el Grado 33º de la Masonería se revelase la sílaba final de la palabra Jahbulon que se refería a la ciudad Bíblica de On (o más recientemente, Heliopolis) en el momento en que la monumental arquitectura erigida para honrar a Ra, el Dios Sol, estaba siendo re-dedicada a Osiris, el Dios de los Muertos. Según la opinión de estos Qabalistas de la post-guerra, los Masones estaban cometiendo un error teológico al tomar toda su Luz sólo de Lucifer, conocido como Baal, pero corrompido como “Bul” dentro de la palabra secreta para Dios. Tanto los Letristas como los Situacionistas consideraban que ON representaba un amplio período de la historia egipcia, y por lo tanto, un balance entre la luz y la oscuridad. La Alianza Neoista considera que la obsesión Situacionista por la Armonía (usualmente expresada de forma negativa, mediante los que los ojos profanos leen como un “lenguaje político” que gira en torno a la idea de “rectificación”) es una idea unilateral. Sin embargo, la Alianza Neoista no es ciega frente a la belleza poética con la que la Situacionista Internacional desarrolló la muy codificada forma de Qabalah que Marx aprendió de Hegel. Volviendo brevemente a Chtcheglov, él luego reveló que los “Jefes Secretos” que controlaban a la Situacionista Internacional estaban ubicados en el Tibet, al igual que fue el caso de quién sería el continuador británico de la Orden Hermética Golden Dawn.
Por lo arriba expuesto, debiera ser obvio para el lector atento que la simultanea realización y supresión de la Masonería va a establecer de forma concluyente que entre las distintas -y necesariamente excluyentes- voluntades de los humanos, existe una voluntad común a la que no se puede renunciar. Ya que la noción de “hombre total” ha sido ampliamente expuesta como un fraude aristocrático, nuestras voluntades individuales son sin duda nuestra única salvación. ¡Tres brindis por la egoísta que solo piensa en sí misma! Una vez que la Masonería sea totalmente realizada y, por lo tanto suprimida, la desintegración social será restablecida en un plano superior. A partir de ahora, la Religión, al descubrirse a sí misma, celebrará en un gran festín su incapacidad para reconciliar luz y oscuridad. La aparición espontanea de la división en la unidad, y la unidad en la división, hace innecesario para el León acostarse con los Corderos. La humanidad es el Diablo, avara y corrupta, mentirosa y ciega por sus propios engaños -y así aparecerán las escarapelas y los moños tricolores, decorando todo lo que existe sin consecuencia. ¡La Religión se separará a sí misma de la belleza también! Jacques de Molay, tu has sido vengado.
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